Autores:
Nugent B, Parker MJ, McIntyre IA. Belfast Health and Social Care Trust, Northern Ireland Cancer Centre, Belfast City Hospital, Belfast, UK. brenda.nugent@belfasttrust.hscni.net
Revista:
Intensive Crit Care Nurs. 2010 Aug 6. [Epub ahead of print]
Resumen:
ANTECEDENTES: En los pacientes con un diagnóstico de cáncer de cabeza y cuello, la alimentación oral no puede proporcionar una nutrición adecuada durante los tratamientos de radioterapia radical o quimiorradioterapia, dando lugar por tanto a la iniciación de alimentación enteral. La alimentación enteral puede administrarse a través de una sonda nasogástrica o por un tubo de gastrostomía. El estudio tuvo como objetivo determinar el impacto de las diferentes modalidades de tratamiento en el requisito para la alimentación enteral y el efecto del método de la alimentación enteral sobre el beneficio para el paciente, como lo pueden demostrar la pérdida de peso y el número de interrupciones no programadas del tratamiento de radioterapia.MÉTODOS: Los pacientes que fueron tratados con radioterapia radical o quimiorradioterapia entre enero de 2004 y junio de 2007 se revisaron de forma retrospectiva (n = 196, 149 hombres, y 47 mujeres). Se recogieron datos sobre la demografía, el diagnóstico, clasificación T y N, estado nutricional, interrupciones no programadas del tratamiento de radioterapia, y el tipo y la duración de la alimentación enteral. Los sujetos fueron divididos en tres subgrupos en función del tratamiento recibido. Posteriormente se hicieron comparaciones entre los métodos de alimentación enteral.RESULTADOS: El tratamiento combinado (quimioterapia de inducción y quimiorradiación) produce una mayor proporción de pacientes que requieren alimentación enteral (66 a 71% en comparación con 12% para la radioterapia). Los pacientes alimentados a través de una gastrostomía endoscópica percutánea profiláctica perdieron una menor cantidad de peso durante el tratamiento (-4,6% a +1,4%), aunque el método de la alimentación enteral no influenció estadísticamente en la diferencia de peso al final del tratamiento. El método de alimentación enteral no influyó en las interrupciones no programadas del tratamiento de radioterapia.CONCLUSIONES: El tratamiento combinado produce una mayor necesidad de alimentación enteral, con una mayor pérdida de peso. Los hallazgos obtenidos en el presente estudio indican que el método de la alimentación enteral no influye en la pérdida de peso al final del tratamiento, ni sobre las interrupciones del tratamiento de radioterapia.