Daniel de Luis
Jefe del Servicio del Clínico de Valladolid
Centro de Investigación de Endocrinología y Nutrición
El pimentón pertenece a la familia de las solanáceas, al género de las capsicum, del que existen más de dos mil especies. El pimentón es el polvo del pimiento rojo (Capsicum annuum), una vez que éste se ha desecado y molido. En nuestras tiendas tenemos tres tipos de pimentón según su origen: el agridulce, el dulce y el picante.
En España, lo conocemos desde 1493, cuando Cristóbal Colón lo trajo de América y lo entregó a los Reyes Católicos como ofrenda. La importancia de esta especia como conservante de las chacinas fue tan grande en el pasado que se le llegó a llamar ‘oro rojo’. En la actualidad, los dos pimentones más conocidos de España son los de La Vera, en Cáceres, y los de Murcia. Desde el punto de vista nutricional, debemos tener en cuenta que lo consumimos en muy pequeñas cantidades en nuestra dieta, no obstante, aporta más de 300 calorías por cada 100 gramos, fundamentalmente a través de los hidratos de carbono (35 gramos), de las proteínas (14 gramos) y grasas (13 gramos), sin embargo el aporte de colesterol es nulo. Con respecto a los minerales destaca el calcio 180 mg, el magnesio 190 mg y el potasio 2300 mg. Pero sin duda lo que sorprende es su contenido en hierro, más de 20 mg (siendo muy superior a carnes y pescados), no obstante, al ser un hierro ‘no hemo’, su biodisponibilidad es inferior a la que tiene el hierro ‘hemo’ de los alimentos de origen animal. En relación a las vitaminas, tiene un interesante contenido en vitaminas del grupo B (B1, B2, B6), y lo que más destaca es la presencia de carotenos con sus propiedades beneficiosas sobre los diferentes epitelios que tenemos en nuestro organismo. El elevado contenido de vitamina K hace que el pimentón sea beneficioso para una correcta coagulación de la sangre. Este alimento también es beneficioso para el metabolismo de los huesos.