Me acaban de diagnosticar celiaquía, ¿Qué hago con mis hijos?
Los asistentes a la Jornada de Salud de El Norte reforzaron el interés de la conferencia de Rocío Aller
VALLADOLID. «Tengo 47 años y me acaban de diagnosticar celiaquía. Y tengo dos hijos de 7 y 14 años. ¿Qué debo hacer con ellos?
La doctora Aller había explicado durante algo más de media hora las características, síntomas y tratamiento de los celíacos en la Jornada de Salud organizada por El Norte de Castilla en el salón de actos de Fuente Dorada de Caja España Duero. Y había hablado entre otros asuntos de los factores genético y ambiental. Pero los asistentes algo más de un centenar querían respuestas concretas para sus problemas particulares, lo que provocó un interesante turno de preguntas que enriqueció la jornada.
«Analítica, comprobar los anticuerpos y, si hay dudas, biopsia».
La doctora Rocío Aller, especialista de aparato digestivo del Hospital clínico Universitario e investigadora del Instituto de Endocrinología completó su intervención dando respuesta a las situaciones personales de algunos de los asistentes que, en algunos casos parecían querer corroborar el diagnóstico de sus médicos.
«¿Está relacionada la epilepsia con la celiaquía?». «Soy celíaco y tengo dos hijos de 4 años y uno de 12, pero sus percentiles son normales ¿Qué debo hacer?»
El turno de preguntas obligó a concretar la teoría y a descender a la casuística de los asistentes a una conferencia a la que vieron dificultado su acceso, poco antes de las 20:00 horas, porque en la Plaza de Fuente Dorada se escenificaba un capítulo más de las protestas contra los desahucios, que impidió el acceso a algunas personas, tras producirse una fugaz ocupación de las instalaciones.
Gullón, sin gluten
La conferenciantes insistió en que la celiaquía, hoy por hoy, es una enfermedad para siempre, pero que una vez diagnosticada es posible convivir con ella sin perder calidad de vida.
«Basta con eliminar los alimentos con gluten, lo que aunque nos parezca complicado, no impide salir victoriosos de un supermercado», dijo, haciendo referencia a que la industria alimentaria da respuesta a quienes padecen esta enfermedad con productos alternativos que no dan problemas. El ejemplo lo dio Gullón, patrocinador de estas jornadas, que repartió galletas sin gluten a la entrada para los asistentes.
Rocío Aller reconoció, sin embargo, que esta dieta tiene un coste más elevado en la cesta de la compra. «Hay dos alternativas, dijo: la dieta de exclusión, es decir, eliminar los alimentos sin gluten; y la de sustitución, para los que no quieren prescindir del pan, la pasta u otros alimentos con esta proteína.
Y la industria da cumplida respuesta a quienes optan por la segunda».
En su intervención hizo también referencia a los peligros de la contaminación cruzada, es decir a la contaminación de alimentos sin gluten cocinados o elaborados junto a otros que lo tienen. Por eso recomendó que cuando hay que preparar alimentos con gluten y sin él, se elaboren primero los destinados a los celíacos. «Hay que separarlos y, por supuesto, no utilizar, por ejemplo, aceites con dieta para personas normales para preparar el menú del celíaco».
Recordó también que el gluten puede encontrarse en alimentos como el chóped o el jamón de york de baja calidad e incluso en los caramelos o algunos medicamentos. Y recomendó que los celíacos acudan asociaciones de personas que padecen este trastorno como Acecale, en el ámbito regional, o FACE en el nacional, donde pueden obtener ayuda e información.